Para variar nada en mi vida puede ser normal.
Hará cosa de 10 o 15 días (no me acuerdo muy bien porque últimamente no controlo mucho el tiempo...........jajajajajajaja, empanada que estoy) hablando con J por el messenger me empezó a decir que tenía algo que contarme, algo muy serio y que no se había atrevido nunca a contarme.
Yo sabía que su vida no había sido muy fácil, que para tener 25 años había vivido demasiado. Sabía que tuvo una temporada en la que tonteo con las drogas, sinceramente no se muy bien hasta donde llegó el "tonteo" pero bueno, me fío de él, y si dice que solo fue eso pues le creo.
Según se iba desarrollando la conversación en el messenger yo no dejaba de pensar en que sería eso tan "grave" que no se había atrevido a contarme nunca, pero por mucho que me imaginara nunca lo hubiera adivinado.
Me contó que hacía algún tiempo se había metido en el juego, que había perdido dinero. Yo seguía sin imaginar lo que me iba a decir (todavía hoy me cuesta creermelo).
Al final resulta que se había metido en timbas (se escribe así?) clandestinas, y había perdido........................ 7 kilos. Yo ingenua todavía no relacionaba esos "kilos" con millones.
Como no tenía ese dinero perdió el piso. Mis ojos no daban crédito a lo que estaban leyendo.
Una sensación de desencanto de apoderó de mi de repente. Nadie es perfecto, todos podemos cometer errores, pero algo así me parece demasiado serio como para considerarlo un error.
Un error es despendolarte después de una separación, salir de fiesta, beber alguna copa de más, liarte con alguien simplemente por hacerlo.............. no se, de alguna manera es como si intentáramos recuperar el tiempo que hemos "perdido" durante nuestra relación de pareja.
Pero tontear con las drogas, meterse en una timba, perder un piso........... uffffffffff, me parece mucho.
Si al desencato que sentí, le unimos la distancia que hay entre los dos tanto física como mental, me empiezan a surgir mil dudas.
Sin querer poco a poco me he ido "enfriando" con él. J lo ha notado y se está agobiando demasiado. Ahora me llama a horas raras, si no contesto se enfada y se pasa tres días sin dar noticias, me dice que me necesita, que quiere conocerme ya, que esta enamorado de mi. Y todo lo que antes me encantaba ahora me da algo de miedo.
Y para rematar la historia: es muy probable que por motivos de trabajo se tenga que marchar un año a La Coruña y me ha pedido que me vaya con él.
Flipada me quedé con la proposición, pero más lo hice cuando ante mi contestación de "es una locura" se enfadó muchísimo. Me empezó a decir que no le quería, que pasaba de él, que volviera con mi ex-marido, mil barbaridades más.
Flipandolo estoy todavía.
¿Por qué no puedo tener una vida normal?
Guadalupe (mi psicóloga) no da crédito a tantas cosas, jajajajajajajajajajaja.