Ahora que he vuelto a recuperar mi "libertad" para escribir aquí lo que me de la gana sin temer que pueda tener consecuencias en mi día a día, os voy a contar una cosa que me paso en la cena de empresa.
Ya se que ha llovido, nevado, y hasta hemos sufrido huracanes, desde aquel viernes 19 de diciembre cuando muchos de nosotros soñábamos con hacernos millonarios en un par de días. Pero bueno nunca es tarde, jajajajajajajajaja.
No sé si alguna vez he contado que en mi curro somos unas 50 personas, de las cuales solo 3 somos chicas. Así que no es nada raro que después de la cena y alguna copilla a más de uno de mis compañeros se le despierte la vena cariñosa y empiecen a decir alguna que otra tontería, pero lo que me ha pasado este año no ha sido nada habitual, por lo menos para mi.
Llegada cierta hora de la noche y cuando ya solo quedábamos unos 15 compañeros, el momento exaltación de la amistad empezó a causar efecto en algunos (a mi no, gracias a Dios, ya que conducía y no bebí).
El caso es que hay un compañero con el que mi relación es simplemente laboral, vamos que hablamos lo imprescindible de curro y eso que nuestros puestos están bastante ligados. Siempre he pensado que yo no le caía muy bien, pero tampoco me ha preocupado mucho. El hijo de mi jefe se pasó todo el rato que estuvimos en el pub del restaurante diciéndome tonterías del estilo, estas muy guapa hoy, te sienta muy bien el morado, casate conmigo, ahora que vivimos solos los dos te puedes venir a dormir a mi casa, ¿si no fuera hijo del jefe te vendrías conmigo?, vamos tu y yo a tomar una copa solos, y alguna tontería mas. No le doy la menor importancia porque él es así y le sé llevar bastante bien. Pero de repente viene mi otro compañero (este compañero tiene novia y está apunto de irse a vivir con ella) y empieza también a decirme alguna que otra tontería, yo flipando. Pero cuando ya me dejo ojiplática fue cuando me dijo:
- Tía, me gustas mucho, siempre me has gustado. Me pareces una tía super sensual y muy sexy. Si me dejas me encantaría cubrir todo tu cuerpo con besos.
No dije nada de nada, simplemente sonreí, di un trago a mi coca-cola y me fui bailando disimuladamente hacía la otra parte del grupo.
Al rato todo el mundo a casa y de vacaciones hasta el día 7 de enero.
La verdad es que no pensé en ello en todas las navidades, pero cuando llegó el día 6 y al día siguiente había que volver al curro me volví a acordar y pensé, ¿con qué cara me va a mirar este chico mañana?
Al día siguiente, simplemente me felicitó el año y en las ocasiones que nos cruzamos evitó mi mirada.
Si es que el alcohol hace mucho daño y no solo en el hígado.
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5 pinchame:
¡¡Tía wena!!
¿Por qué no te casas conmigo? mira que tengo casa propia ¿eh?
xDDDD
Vaya empacho de pipas llevo hoy...
Besos de una maia.
Jajajajaja...¡Que horrooooor! de situacion.
Si es que el alcohol es lo que tiene...que hablas mas de la cuenta. Que efecto mas gracioso, ¿no?.
Besos,
Amanda
Bueno, ya sabes lo que dicen, no??? Que los niños y los borrachos siempre dicen la verdad!!! Jajajaja!!!
Puede que el alcohol hiciera su efecto, pero si no lo pensara... no te lo habría dicho!!
Y tú qué??? No le dices nada?? Jajaja!!!
Un besazooo
Bueno, la cosa no tiene más importancia... alcohol y ganas de juerga suelen unirse!!!! Por cierto, mi cena de empresa tb fue el 19 y mi jefe me dio un abrazo que si por poco me asfixia!!!! (ay amores que matan!!!).
El alcohol es mu malo y dices cosas que piensas (no sale nada que no este ya dentro) pero que autocontrolas... no se lo tengas mucho en cuenta. Quizás ahora sabes porque no te hacía mucho caso: cuando a mi me hace tilín alguien, lo evito, intento no acercarme mucho... porque es solo tilín y mi pareja es tolón... ¿me explico? En finsssss.
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